TIGRES,
(MEJILLONES CON SALSA DE TOMATE PICANTE)
INGREDIENTES: -1 Kg. de mejillones de Galicia
-1 Kg. de tomates maduros, (o 1 bote de 800 gr. de tomate triturado)
-1/2 cebolla
-1/2 guindilla picante
-1/2 vaso de vino blanco
-2 vasos de caldo de cocer los mejillones
-1 pizca de sal
-1 pizca de azúcar
PREPARACION:
Con un cuchillo rígido,
quitamos los restos de conchas y otros elementos duros adheridos a la concha
del mejillón, con un estropajo metálico, raspamos bajo el chorro del grifo para
eliminar el resto de materia orgánica adherida, hasta dejar la cascara del
mejillón limpia.
Una vez limpios, pasamos a
una cazuela, añadimos un vaso de agua y ponemos al fuego hasta que los
mejillones se abran al vapor, (los mejillones no deben estar cubiertos de agua,
cuando abran, o estos reducirán su tamaño, se echa solo un poco de agua en el
fondo, para que estos abran al vapor).
Una vez abiertos vamos
retirándolos de la cazuela, conservamos la cascara a la que esta adherido el
mejillones, desechando la otra, vamos colocándolos en una cazuela de barro,
colamos el caldo de cocer los mejillones y reservamos.
Para hacer la salsa de
tomate picante, picaremos lo mas finamente posible la cebolla, cortamos la
guindilla en aros, pochamos la cebolla a fuego mínimo con un poco de aceite,
(el suficiente para empapar la cebolla, no mas), añadimos un poco de sal para
que la cebolla sude el jugo y no se queme e incorporamos los aros de la
guindilla, para que vaya añadiendo el toque picante a la salsa, removemos
constantemente, para que no se queme la cebolla.
Cuando la cebolla este
blanda y adquiera un tono transparente, (unos 15 minutos), añadimos el tomate
picado fino o triturado, subimos el fuego, añadimos un poco de sal, (no mucho
ya que el caldo de los mejillones aportara también un toque salado) y una pizca
de azúcar, para quitar la acided del tomate y dejamos sofreír 5 minutos.
Pasados
los 5 minutos, añadimos el medio vaso de vino blanco y dejamos evaporar el
alcohol un par de minutos, añadimos un vaso de caldo de cocer los mejillones,
bajamos el fuego y dejamos hacer unos 40 o 45 minutos a fuego suave, el resto
del caldo, lo vamos añadiendo a la salsa, según esta se vaya secando y lo vaya
necesitando.
Una vez que la salsa esté en su punto, rectificamos de sal, si lo
necesitase, retiramos los aros de guindilla y la vertemos en un pasapuré que
tendremos preparado encima de un chino, puesto sobre una jarra. Trituramos la
salsa en el pasapuré, con una espátula de madera o el machacador de un mortero,
vamos removiendo y empujando la salsa para colarla a través de los agujeros del
chino y reservamos la salsa que quede recogida en la jarra.
Cubrimos los mejillones de la cazuela con la salsa y calentamos el
conjunto, hasta que los mejillones vuelvan a estar calientes, servimos los
mejillones en una fuente y regamos con la salsa.
CONSEJOS DEL CHEFF ANTUAN:
Los mejillones
los podemos abrir con 1/2 vaso de vino blanco en vez de agua, también podemos
poner una hoja de laurel en la cazuela a la hora de abrirlos, para
aromatizarlos.
Aunque solo pongamos un vaso de agua, el
mejillón suelta su propia agua que tiene retenida dentro y el resultado es mas
de dos vasos de caldo, suficientes para hacer la salsa picante.
Si os gusta más picantes, podemos añadirle
la guindilla entera o unas gotas de tabasco al final, si no picasen lo
suficiente.
Si os gusta que la salsa quede muy fina, en
vez de tomates enteros, podéis hacerla con una lata de 800 gr. de tomate
natural triturado.
Para este plato, los mejillones siempre se
deben abrir al vapor, que es con un dedo de agua en el fondo de la cazuela, sin
que los mejillones queden sumergidos en el agua, de esta forma se abren y
cocinan al vapor, en vez de hervidos, lo que permite que el mejillón conserve
su tamaño original y todo su sabor, de lo contrario el mejillón recruaria al
hervir, quedaría mas pequeño y con el sabor deslavado.
Los mejillones si son gallegos mucho mejor,
hay una diferencia sustancial entre estos y de otras zonas, en sabor y tamaño.
Cheff Antuan |
Muy buenas las sugerencias de los mejillones que además es muy sano comerlos por su aporte de hierro (me enteré hace poco de sus cualidades). Leí la receta del Arroz con bogavante, pero se me atragantó de sólo pensar en tener que "cargarse" un@ mism@ al susodicho. Si consigo pescadero que lo haga probaré la receta si no me temo que seguiré quedándome con las ganas. Felicitaciones en cualquier caso por la misma. Tenía una pinta exquisita y doble valor tiene por haber sido capaz de realizar tú mismo el acto de matarlo. Un saludo, G.
ResponderEliminarEs la última vez que hago estaa receta si tengo que matarlo yo mismo, menudo trago, eso sí estaba riquisimo, aunque durante la siesta posterior se me aparecia la cara del bogavante moviendo las antenas y señalandome con las pinzas con una mueca desencajada, (je, je, sentimiento de colpabilidad).
ResponderEliminarHe aprovechado mis vacaciones en galicia para hacer todas las recetas con marisco que he podido. La de los tigres me quedo muy buena, a ver si esta semana hago la de spagüetti en salsa puttanesca